ADRA

La obra representada hoy en el Centro Cultural por Paqui Díaz y David Lobo ha permitido a los alumnos de los UES realizar un viaje por el mundo y submundo del teatro.

Al término de la representación los actores han realizado una charla-debate con los alumnos que han tenido la oportunidad de plantear dudas, reflexiones o inquietudes para conocer más el género teatral.

Viajar a la época dorada del teatro, el siglo de oro de la mano de dos de los cómicos de la legua que, de forma ambulante, recorrieron pueblos, aldeas y cortijos como fueron María Navas y Agustín Solano es lo que ha ofrecido hoy la compañía Abulaga a más del centenar de alumnos de los IES Virgen del Mar y Gaviota de Adra que se han dado cita en el Centro Cultural a partir de las doce del mediodía. Una actividad enmarcada dentro de los objetivos de la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Adra de fomentar las artes escénicas entre las nuevas generaciones abderitanas, especialmente escolares de primaria y secundaria de la localidad.

En ella, y gracias a la interpretación de los actores Paqui Díaz y David Lobo que daban vida a Navas y Solano, los alumnos han podido entender como era el teatro del siglo de oro, la forma de vida de esos cómicos de la legua, especie de juglares con mucho carácter de la Edad Media todavía que acudían a las aldeas y cortijos, el teatro de corrales, los patios de vecindad habilitados para las representaciones y, sobre todo, las emociones, los miedos o anhelos de esos poetas dramaturgos a los que Calderón de La Barca o Lope de Vega consolidaron.

Todo ello, es lo que han transmitido los actores de la compañía Abulaga Teatro sobre el escenario con una obra de teatro sobre el propio teatro que, a lo largo de los 60 minutos de espectáculo, ha invitado constantemente a la reflexión y a la comprensión de una época y unas compañías de teatro humildes, capaces de escapar de la férrea censura de la Inquisición, para representar unas obras que, en su mayoría, destacaban por carácter burlón y satírico.

Con pocos elementos sobre el escenario, sólo un viejo carro, los actores han sido capaces de recrear y mezclar el teatro actual con los géneros del siglo de oro, explicando en la propia actuación que era un entremés, un auto, la gangarilla o la garnacha. Y todo ello, para acercar a los más jóvenes a un teatro tan espléndido como el siglo de oro y a la figura de esos cómicos de legua que tanto apreciaba el público popular.

Asimismo, los actores han ido más allá haciendo reflexionar con su espectáculo sobre el papel que representa cada uno dentro de la propia representación. Y lo han hecho, intentando intercambiar los papeles e interactuando de forma constante con los asistentes.

Tras la obra, los actores han ofrecido una charla-coloquio con los alumnos, donde estos han tenido la oportunidad de preguntar a los actores en todos aquellos aspectos relacionados con el teatro, su supervivencia, sistemas de memorización de textos o la evolución que ha sufrido este género literario.